¿Cómo evitar el desgaste de la cadena de la bicicleta?

La cadena es el elemento fundamental de la transmisión de una bicicleta. Sin ella, nuestra bici no avanzaría. Por lo tanto, para rodar correctamente, habrá que cuidarla. A continuación le mostramos algunos consejos que le servirán de ayuda para comprobar y evitar el desgaste de la cadena de la bicicleta y, sobre todo, a realizar un mantenimiento correcto.

¿Por qué debemos comprobar el desgaste de la cadena de la bicicleta?

La cadena está formada por pequeñas piezas móviles que, con el paso del tiempo, se deterioran, por lo que es fundamental limpiarla correctamente. Tampoco podemos olvidar lubricarla bien para evitar un desgaste prematuro, pero pese a realizar su correcto mantenimiento, debemos ser conscientes de que la cadena siempre acabará deteriorándose y dando de sí con el paso del tiempo. Este desgaste también será mayor o menor dependiendo de las condiciones de uso.

Este desgaste se debe principalmente a la fricción entre los casquillos y los rodillos. Progresivamente el espacio entre estos elementos irá en aumento con el paso del tiempo provocando un alargamiento inevitable de la cadena, y haciendo que esta sea cada vez menos efectiva. El deterioro de la cadena provoca daños tanto en los platos como en el cassette o piñones, por lo que será necesaria una comprobación periódica del grado de desgaste y prever su sustitución antes de que sea demasiado tarde.

¿Cómo proceder a medir el desgate de la cadena de la bicicleta?

Existen varias formas de comprobar el desgaste de la cadena de una bicicleta. Si es nueva o está en buen estado cada uno de sus eslabones encajará de manera perfecta entre 2 dientes de los platos y de los piñones. Por el contrario, si esta gastada, el eslabón habrá estirado, tendrá holgura y se moverá entre los dientes de los platos y piñones.

También podemos comprobar si nuestra cadena está gastada al intentar sacar con nuestros propios dedos la cadena del plato, si la cadena presenta desgaste al tirar de ella confirmaremos que la cadena presenta holgura, pudiéndola liberar sin demasiada resistencia. Por el contrario una cadena nueva será extremadamente difícil tirar de ella y que esta se mueva. Si podemos tirar de la cadena ligeramente, pero el diente del plato o piñón no es visible completamente, el desgaste será leve. Por el contrario, si al tirar de la cadena la altura de esta supera la del diente, será necesario reemplazarla por una nueva.

¿Cómo usar el medidor de cadena?

Para mayor precisión, también podemos hacer uso de un medidor de cadena graduado en pulgadas. Este nos ayudará a determinar el desgaste de la cadena. En el medidor podremos observar 2 puntos salientes por cada lado, con una medida diferente cada uno. Un lado indica 0.75 mm y el otro 1.0 mm que marcan el porcentaje de estiramiento que tiene nuestra cadena.

El medidor de cadena no entra por ninguno de los lados

Intentamos colocar el medidor de cadena por el lado de 1.0 mm y observamos que el medidor no entra dentro del eslabón. Procedemos a realizar la misma operación pero por el lado contrario, por donde indica 0.75 y también comprobamos que el medidor no entra dentro del eslabón. Si no ocurre esto, no tenemos de que preocuparnos. Nuestra cadena esta en perfecto estado.

El medidor de cadena entra por el lado de 0.75 mm

Colocamos el medidor sobre nuestra cadena por el lado de 0.75 mm y el medidor entra perfectamente en los eslabones. Procedemos a realizar la misma operación pero por el lado de 1.0 mm y el saliente no entra en el eslabón. Eso significa que ya debemos pensar en cambiar la cadena, ya que se ha estirado en un 75%. Aún puedes seguir haciendo kilómetros con ella, pero realizando una medición regular de la misma.

El medidor de cadena entra por ambos lados

Si el medidor de cadena, entra por ambos lados, 0.75 mm y 1.0 mm, en los eslabones de nuestra cadena, eso significa que debemos cambiar con urgencia nuestra cadena. Si apuramos demasiado la cadena, y ya ha estirado mucho, puede ocurrir que al cambiar de cadena tengamos también que cambiar de piñones (cassette), incluso de platos.

Por tanto, el desgaste de la cadena de la bicicleta será gradual e irreversible en el tiempo. Dará como resultado descarrilamientos frecuentes, chirridos, una reducción en la eficacia del sistema de cambio e incluso el riesgo de rotura.

Un buen mantenimiento para evitar un desgaste demasiado rápido de la cadena de bicicleta

Para evitar el desgaste prematuro de la cadena de la bici, debemos hacerle un mantenimiento de manera regular. El polvo, la arena y todo el resto de suciedad adherida a la cadena son elementos que reducirán considerablemente la vida útil de la cadena. Para protegerla de todas estas impurezas, es muy recomendable hacer una pequeña limpieza inmediatamente después de cada salida. Hay dos procesos diferentes, el primero requiere un cepillo, y el segundo una caja limpia cadenas.

Primera fase: Desengrasar la cadena

Necesitaras un buen desengrasante como por ejemplo el WD-40 especialmente para bicicletas y un trapo. Puedes elegir entre un desengrasante para pulverizar en spray o para aplicar. Humedezca el trapo con el desengrasante y luego envuelva la parte posterior de la cadena con él. Apriete con fuerza y deslice el trapo sobre la cadena. Notarás que la cadena y los pedales giran solos. Repita la operación para limpiar una nueva sección de cadena. Por ultimo, limpie la cadena con un paño nuevo.

Si quiere ahorrar dinero, hay una solución más barata: el gasoil. De hecho, es un limpiador muy bueno. Una vez que hayamos limpiado toda la cadena, seque todo con un paño limpio. También podemos aprovechar para limpiar toda la transmisión (platos, cassette, desviador) y las ruedas. Para limpiar correctamente todas las partes de la transmisión, existen en el mercado cepillos específicos que pueden acceder a todos los rincones y pequeñas piezas de la transmisión.

Segunda fase: la lubricación de la cadena

Después de la limpieza, no olvide lubricar bien la cadena. Existen productos especialmente diseñados para este uso y se recomienda usar lubricantes de cadena a base de ceras. Lubrican penetrando mejor en los eslabones, duran más tiempo y mantienen la cadena limpia ya que repele las impurezas. Coloque la cadena en uno de los piñones intermedios. Aplique el lubricante al cassette mientras hacemos girar el pedal hacia atrás. Es recomendable ir cambiando de piñones y platos para lubrican toda la transmisión. Recuerde quitar el exceso de lubricante con un paño limpio.

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Limpiar la cadena con una caja limpia cadenas

Para facilitar la limpieza sin manchar y hacerlo de manera rápida y eficaz por toda la cadena, podemos usar una caja limpiacadenas.

Primera fase: desengrasar la cadena

Para ello será necesario abrir el cajetín y añadirle el desengrasante. Una vez realizado esto, procederemos a colocar la caja debajo de la cadena de la bicicleta y a cerrarla, asegurándonos que la cadena quede correctamente dentro de la caja. A continuación deberemos hacer girar el pedal.

Segunda fase: la lubricación de la cadena

Será necesario verter lubricante en la cadena mientras se pedalea hacia atrás. Una vez que la cadena esté lubricada, deberá limpiarla con un trapo limpio.

Ahora que sabemos cómo hacer el mantenimiento a la cadena de nuestra bicicleta y controlar su desgaste, podemos profundizar un paso más y aprender a quitar el óxido de la cadena de la bicicleta y así aprovechar al máximo las posibilidades de nuestra bicicleta.