¿Cómo llegar fresco al trabajo en bicicleta?
Hoy en día, cada vez más personas dejan el coche y el transporte público para ir al trabajo en bicicleta. También llamado “commuting”, este modo de transporte es ecológico y bueno para la salud. Pero cambiar tus hábitos necesariamente requiere tiempo para adaptarte. Algunas personas todavía evitan los clichés asociados con el ciclismo. Por ejemplo, el compañero que llega sudoroso y desaliñado a la oficina, y te quita las ganas de coger la bici para ir al trabajo. Muchas ideas preconcebidas sobre el ciclismo son falsas. Montar en bicicleta no significa necesariamente sudar. Sólo necesitas aplicar algunos pequeños consejos para conservar tu outfit y llegar fresco al trabajo, incluso después de montar en bici.
¿Cómo mantener una apariencia profesional mientras montas en bicicleta?
Para lucir siempre fresco y presentable, y esto se aplica a todo tipo de situaciones, la clave es centrarse en una buena organización. Cuando nos desplazamos en bicicleta realizamos un esfuerzo físico. Por tanto, el cuerpo reacciona produciendo sudor. Para evitar los efectos desagradables de la sudoración mientras montas en bicicleta y ahorrarte molestias, tienes a tu disposición varias soluciones.
Elige ropa de ciclismo transpirable para evacuar el sudor
Para estar fresco y cómodo durante todo el día, la mejor solución es llevar una camiseta de repuesto a la oficina. Así podrás hacer el trayecto en bicicleta con una camiseta adecuada para hacer deporte, y cambiarla por una ropa limpia al llegar al trabajo. Esta es la solución ideal en verano, para no llegar sudando a la oficina. En invierno, no lleves puesta la chaqueta cuando vayas en bicicleta, porque pedalear te calentará rápidamente. Es mejor llevarla en una alforja o una bolsa, o en una cesta para bicicleta.
Si esto te parece demasiado engorroso, o tu lugar de trabajo no dispone de vestuarios, es posible mantener la misma ropa cuando vas en bicicleta y en el trabajo. El truco consiste en centrarse en materiales que absorban la transpiración de forma más eficaz al montar en bicicleta. Contrariamente a la creencia popular, el maillot ciclista de lycra no es la prenda más adecuada. Te empaparás rápidamente una vez finalizado el esfuerzo y no resulta muy estético. Hay camisetas y polos en el mercado que cuentan con almohadillas para las axilas que absorben la humedad y el sudor. Muy discretas, estas camisetas interiores evitan la formación de halos y se llevan como una camiseta clásica debajo de una camisa. Están recomendados para personas con tendencia a la hiperhidrosis (hipersudoración). Te permitirán lucir un conjunto ciclista que combine comodidad, estética y limpieza.
Finalmente, si estás dispuesto a invertir un poco más en tu outfit, la ropa de lana merino es la mejor solución del mercado. Aislante, resistente y termorregulador, el merino no retiene olores ni humedad.
Y para optimizar aún más tu outfit, consulta nuestra guía sobre cómo elegir tu ropa de ciclismo.
Llevar un kit de higiene al trabajo
Aquí tienes una lista de elementos esenciales que debes llevar en las alforjas de tu bicicleta o dejar en la oficina para asearte in situ:
• desodorante
• ropa de repuesto
• toalla de algodón
• toallitas refrescantes
• bolsa de maquillaje
• cepillo o peine para volver a peinarte después de usar un casco de bicicleta
• ropa de lluvia para ciclismo: cubrepantalones, cubrezapatos, chaqueta cortavientos impermeable
Usar alforjas en lugar de una mochila
Debemos abandonar la imagen que tenemos del ciclista urbano que va siempre con su mochila. Esto último debe ser evitado por quienes deseen evitar los cercos de sudor debajo de los brazos. Al llevar la mochila pegada a la espalda no deja circular el aire y crea zonas de transpiración. Los ciclistas experimentados saben que es mejor optar por alforjas en la parte trasera de la bicicleta. Te recomendamos que sean fácilmente desmontables, para que puedas llevar tus cosas sin problema al trabajo.
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Trata el problema desde la raíz: pedalea mejor u opta por una bicicleta eléctrica
Aprende a gestionar el esfuerzo para reducir la sudoración mientras pedaleas
A menudo, la sudoración en bicicleta no aparece al pedalear, sino mucho después del esfuerzo. Una vez te paras, el aparente viento que refresca nuestro cuerpo durante el ejercicio desaparece repentinamente. Por tanto, el cuerpo comienza a sudar para regular su temperatura.
De hecho, es mejor pedalear a un ritmo de crucero y mantenerse seco que forzar los pedales. Tómate de 10 a 15 minutos más que el tiempo de trayecto habitual para nivelar el esfuerzo. Además, será una oportunidad para disfrutar más del trayecto y convertirlo en un momento de placer, sin estrés.
Una eBike para ir a trabajar sin problemas
Además, el santo grial del commuter es conseguir una bicicleta eléctrica. En este caso, basta con aumentar la asistencia eléctrica durante los tramos más difíciles del recorrido para evitar sudar mientras pedaleas. Será de gran utilidad si el trayecto cuenta con un gran desnivel.
Si lo que te desanima es el presupuesto, ten en cuenta que en algunas regiones existen bonificaciones por la compra de una bicicleta eléctrica. Estas medidas se toman en particular para fomentar la bicicleta, que es más ecológica que el coche. Infórmate sobre las posibles subvenciones para poder obtener una eBike.
Instalar duchas en el trabajo para fomentar el uso de la bicicleta entre los trabajadores
Hoy, el Estado ofrece a los empresarios paquetes de movilidad sostenible con el fin de fomentar el uso de la bicicleta. Sin embargo, no son obligatorias ni van acompañadas de una infraestructura adecuada, como la provisión de una ducha o un aparcamiento para bicicletas. Ducharse al llegar después de un trayecto en bicicleta es la mejor forma de regular la temperatura corporal y pasar el día seco. Sin embargo, pocas empresas ya han adoptado este tipo de infraestructura. Todavía queda un largo camino por recorrer para anclar firmemente el commuting en las prácticas diarias de los franceses.
Sin embargo, es posible pedirle a tu empresa que instale duchas en el lugar de trabajo. Aunque no es una obligación legal en la mayoría de los casos, el empresario está obligado a velar por la limpieza individual y la calidad de vida de los empleados.